¿El universo de 'The Walking Dead' salpicado por un nuevo "escándalo"? Después de la salida del showrunner Frank Darabont que asombró a más de uno, Robert Kirkman, creador del comic e inspirador de la serie, es el objeto de persecuciones judiciales
Tony Moore, uno de sus antiguos colaboradores y amigo de la infancia, reclama la copaternidad del 'bebé'. El dibujante, que había ayudado a construir el edificio en los primeros tomos de 'The Walking Dead' y contribuido a la creación del proyecto, acude a la justicia para hacer valer sus derechos y exigir parte de las ganancias. Moore asegura que el acuerdo de origen preveía una repartición equitativa de los derechos de explotación de sus diferentes proyectos comunes. En 2005, Moore habría sido incitado a firmar una cesión fraudulenta de sus derechos con el fin de permitir a la adaptación televisiva 'The Walking Dead' salir a la luz. Al final, Kirkman habría cosechado toda la gloria y la fortuna. Sintiéndose engañado, Moore está dispuesto a llevar el asunto delante de la justicia.
Puesto en contacto con Deadline, el abogado de Kirkman afirma: 'Es perfectamente grotesco. Sr. Moore no le debe absolutamente nada. No hay fraude. No se le debe dinero. No existen deudas'. Y añade: 'Al final, el señor Moore va a acabar por pagar los honorarios de abogados del señor Kirkman'.
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